¿Se enteraron? Parece que después de 1300 años, arqueólogos mexicanos del INAH develaron que Teotihuacán significa «Ciudad del Sol» y no «Ciudad de los Dioses» como se creía hasta la fecha.
Teotihuacán, fundada en el año 100 A.C., fue una gran metrópoli sagrada, conocida por sus pirámides, cuyos orígenes y pobladores siguen todavía inciertos. Hasta 2016 se había excavado solo el 5% del sitio arqueológico y no se tiene certeza de qué causó su declive. Se sabe que perduró hasta el año 650 D.C, pero se desconoce dónde yacen sus gobernantes o cuál era la lengua dominante.
Ahora nuevos análisis arqueológicos, de inscripciones y de símbolos de varios documentos que datan del siglo XVI, como el Códice Xólotl desafían la traducción anterior, que se popularizó en el último tercio del siglo pasado.
«La urbe fue nombrada Ciudad del sol por los pueblos que llegaron a la zona después del siglo VIII, una vez que ésta había sido abandonada por sus pobladores originales«, indicó el INAH en un comunicado.
La clave para sustentar esta nueva interpretación está en el Códice Xólotl, un relato pictográfico del siglo XVI que recorre 400 años de historia de la ciudad de Texcoco y del valle de Teotihuacan. El manuscrito se encuentra en la Biblioteca Nacional de París en Francia desde el siglo XVII y en él un par de imágenes de un sol y una pirámide ilustran el glifo con el que conoce a Teotihuacan, solo que debajo de esos pictogramas aparecería la palabra Teo uacan, como se habrían referido ya los pobladores indígenas a principios de 1400.

Fuente: Un nuevo nombre para Teotihuacan